domingo, 20 de diciembre de 2015

Horóscopo 2016 (II)





Libra: a estas alturas de la película deberías reconocer que la princesa Leia no va abandonar su lejana galaxia para vivir contigo en un adosado del extrarradio. Con tu habilidad para churruscar cualquier comida deberías montar un puesto de garrapiñadas. Cuídate de los abrelatas, los carga el diablo.

Escorpio: olvida todas las dietas, lo único que adelgaza es follar, y si no que te quiten lo bailado.  Tu plan de convertirte en una Belen Esteban para hípsters y querer venderles bolsos de baratillo es arriesgado. Si no das con el amor de tu vida mientras adelgazas seguro que lo conoces en algún concierto de una nueva banda emergente de shoegaze.

Sagitario: visto lo poco que sacaste el pasado año haciendo de Baltasar éste haz de camello que da más dividendos. Cuida tu Harley, es un imán para las churris. La ingesta compulsiva de regaliz de palo puede convertirte en un apalancado.

Capricornio: tu natural apostura y donosura seguirán haciendo estragos entre las hordas de playmates descarriadas, pero tu proverbial poder de convicción reconducirá su furor uterino hacia la construcción de maquetas con palillos y otras obras edificantes. El resto sin novedad.

Acuario; tu trabajo como moderador de un foro de filatelia te está sacando de tus casillas, con lo bien que estabas vendiendo memoralibia de la ponferradina. Ese travelo que te hace ojitos solo quiere que seas otra muesca en su revolver. No bebas la gaseosa muy fría ni el carajillo muy caliente.

Piscis: tu cuadrante estelar está atravesado por una fina lluvia de meteoritos que imposibilita cualquier maniobra de acercamiento a ese camarero macizo que tira las cañas recreándose en la suerte. La traducción de las obras completas de Santa Teresa al serbocroata te dará fama pero no beneficios. No podrás dejar el abanico ni en verano ni en invierno.

Si algún lector no está a gusto con su porvenir que se ponga en contacto con nosotros y le elaboraremos un futuro a su medida. Eso sí, tampoco pidan imposibles. Por lo demás, recuerden que el universo entero nada puede ante su soberana voluntad.