¡Ding-Dong!
─ ¿Qué quiere?
─ ¿Es usted la entidad que habita esta localización?
─ Ehhh supongo que sí. ¿Usted quién es?
─ EZ23WK, pero dada la escasa capacidad de abstracción de su especie, puede llamarme Paco.
─ ¿Paco?
─ Soy líder coaxial de la pléyade.
─ ¿Pléyade?
─ La fuerza científico militar del planeta Yolo, destinada a conquistar su mundo, y hemos decidido empezar por su casa.
─ Vaya suerte la mía. Por qué no va donde los del 4B, están todo el día con pelis de zombis avinagrados, seguro que les hace más ilusión.
─ Nuestros qubik escáneres indican que usted es el individuo promedio de su especie. Le estudiaremos para conocer los flancos débiles de sus cerebros precognitivos
─ No me puede tocar la loto no, me tiene que tocar un marciano.
─ Comprendo que su limitada inteligencia espacial confunda el cuarto planeta de su sistema con la ubicación de nuestra civilización.
─ Marciano o murciano, el caso es dar por saco. ¿Qué le hace pensar que soy el típico terrícola?
─ En vez de copular con vistas a perpetuar su especie se dedica a autoescitarse con imágenes virtuales.
─ Eso no es cierto, a veces me la casco de memoria. Es lo que hay, las mujeres no me quieren ni para escobilla del váter.
─ En vez de ampliar el acervo científico y la competencia tecnológica de los suyos, dilapida su tiempo en vídeo juegos pueriles.
─ Matar marcianitos verdes con orejas de trompetilla hace que me sienta realizado.
─ En vez de relacionarse en vivo y en directo con sus semejantes, manda mensajes incongruentes plagados de emoticonos por las redes sociales.
─ Nada de incongruentes, la peña se cree que son paridas súper curradas.
─ Por ello, queremos reclutarlo para nuestra empresa.
─ ¡Por quien me toma, nunca traicionaré a los míos!
─ Le ofrecemos contrato indefinido, bonos por objetivos, retribución en especias, vacaciones pagadas, vehículo de empresa, trienios.
─ ¡Así hablan los míos! ¿Dónde firmo?