lunes, 20 de noviembre de 2017

El Timón del Sur

novela el timon del sur por perez chaf



El Timón del Sur es una novela de aventuras, una historia de piratas que poco a poco se va complicando con elementos fantásticos. Bebe de los clásicos, de Stevenson, Verne, Lovecraft y tantos otros, e intenta ser divertida y entretenida. Es la primera entrega de La Saga de Sursum, donde Maider, la protagonista, tendrá que velar por el equilibrio de los infinitos planos de la realidad sin perder el buen humor.

Así que quedan todos invitados a mis aventuras bucaneras, desde ya en su librería preferida o aquí, con poetas sin pelos en la lengua, piratas con halitosis, gobernadores con un gran fondo de armario y monstruos escondidos en los pliegues del tiempo.

lunes, 13 de noviembre de 2017

Matraca navideña

Llevamos días ya bajo el fuego cruzado de las ofertas navideñas que servirán para que gocemos en plenitud de estas entrañables fiestas, en las que todas las familias serán una piña y todos estarán a partir un piñón con el prójimo. Para que todo sea así las empresas se dejan los piños por servirnos, generalmente con pingues beneficios.
Como suele ocurrir, la ciencia viene a corroborar algo que el sentido común hace tiempo que daba por descontado. Bueno, lo de científico no queda muy claro, que no sabemos si la psicología es una ciencia social, exacta o infusa. El caso es que una que tiene un título que pone psicóloga, la británica Linda Blair, se despachó a gusto diciendo que los villancicos pueden ser perjudiciales para nuestra salud mental. Según la experta, estos diabólicos sonsonetes repetidos machaconamente que aluden en sus letras la necesidad de comprar regalos, organizar viajes, reuniones y fiestas pueden estresar al personal, sobre todo si estamos dos meses y pico aguantando semejante cencerrada.
Así se demostraría que el nacimiento de Jesús en verdad no es más que una estratagema del maligno para buscar nuestra perdición. No hay noche de paz ni día de descanso que valga mientras nos atosigan con semejantes músicas, así se ahoguen todos los peces de río y se vuelvan a ahogar. Y si encima nos ponen a los coros a la suegra y al cuñado, es normal que más de uno colapse y prefiera refugiarse en la locura que soportar la loca realidad. Con lo feliz que es la gente a su bola tocando la zambomba.  

lunes, 6 de noviembre de 2017

Alta vanidad



El pavonearse delante del prójimo es una de las grandes aficiones de la peña, y desde que existen las redes sociales es todavía más fácil dar la nota. No importa que en la vida analógica te pegues por unas bragas en el Primark, en la vida digital posarás indiferente con un visón mientras tomas caviar a cucharadas. Pero en este juego de apariencias también hay clases y a los rusos hay que echarles de comer aparte.
Las antiguas repúblicas de los soviets pasaron de un comunismo a machamartillo a un capitalismo de catecismo, con una casta de nuevos ricos con el deje hortera de los que pueden comprarlo todo menos el buen gusto. Después están los que quieren pero no pueden, y para ellos ha nacido Private Jet Studio, una empresa moscovita que te alquila un jet privado para que saques fotos en el y luego puedas subirlas a Instagram y que todos tus seguidores se mueran de envidia. Por unos doscientos euros estás dos horas para que hagas todas las fotos que quieras, y si pones el fotógrafo te hacen rebaja. Si te sobra el dinero, por el doble te puedes grabar en video despatarrado sobre el asiento de cuero mirando indiferente por la ventanilla, o haciendo que estudias un informe de ventas amorrado al minibar. El caso es epatar y conseguir likes.

Se preguntarán qué vuelo se puede realizar en esas dos horas de sesión fotográfica, y les diremos que para ese viaje no necesitarán alforjas pues el jet no se mueve de la pista. Así se evita el estrés de volar, y sobre todo la minuta de la tripulación y el combustible. Pero eso sus seguidores no tienen por qué saberlo. Ustedes compongan la sonrisa de superioridad del que se encuentra en la cima del mundo, que cuando se bajen del jet y vuelvan a casa en metro nadie sabrá que es un magnate de tapadillo.