lunes, 1 de abril de 2019

Boda submarina

boda bajo el agua
Rosario y los inagotables Marcos Prior

Algunos matrimonios hacen aguas desde el minuto uno, pero estos antes de darse el sí ya estaban con el agua al cuello. Los que se casan en el fondo del mar tienen la ventaja de que sólo pueden mejorar. Hay noticias contradictorias sobre la luna de miel. Unas fuentes afirman que contrataron un crucero de lujo que se fue a pique en los mares del sur, con lo cual volvieron a la casilla de salida. Otras fuentes los sitúan en un agua park de la costa del sol, donde fueron detenidos por escándalo público al intentar consumar el matrimonio en un tobogán. Desde aquí les deseamos que su enlace no quede en agua de borrajas.

lunes, 25 de marzo de 2019

Catapultas

catapultas
calvin y hobbes Watterson

El noble gremio de los ferreteros ya no es lo que era. Cerraron muchas tiendas donde los mismo te vendían clavos para herrar caballerías que la arandela que hacía de tope al rotor del molinillo de café. En la época de la obsolescencia programada ya no tiene sentido acudir a por piezas de repuesto. Los bazares chinos inundan el mercado con sus destornilladores de usar y tirar. Los ferreteros tienen que controlar su stock si quieren seguir en el mercado. Pero todo tiene su límite y que ya no surtan de objetos de uso cotidiano como catapultas puede devenir en desafecto por parte de la masa de clientes. Muchos se verán tentados a fabricarlas por su cuenta, con el consiguiente sobrecoste.

lunes, 18 de marzo de 2019

Cabinas

retrete cabina


Las cabinas telefónicas son esa parte del mobiliario urbano que se ha vuelto transparente a fuerza de no usarlo. Nadie cruza las calles con premura ojo avizor en busca de aquellos quiosquillos acristalados para dar recado de que llegará tarde a la cita con su amada, pasarle el soplo a la pasma sobre una red internacional de tráfico de valores postales o llamar a la tía del pueblo por saber qué tal iba la recogida de la patata. Desde que llevamos teléfonos en el bolsillo miramos por encima del hombro ese vestigio del pasado donde por unas monedas podías poner llamadas locales y hasta conferencias. A pesar de que las compañías pasan de ellas se resisten a morir, y como se ve en la fotografía, hay quien le encuentra nuevos usos. Seguro que más de uno con un apretón agradecerá el poder evacuar de forma correcta viendo la vida pasar en vez de meterse tras un seto o ir al retrete cutre de algún bar. López Vázquez quedó atrapado en una, hoy sería difícil pues nadie entra en ellas ni a robar la magra recaudación, pero como urinario quizá tenga futuro estas piezas del pasado. Se necesitaría alguno de estos influenciers a los que les falta un hervor para subir fotos a Instagram alabando el marco vintage y los sorprendentes efectos sobre la motilidad intestinal de las queridas cabinas y que sus seguidores se caguen de envidia.