lunes, 15 de julio de 2013
lunes, 1 de julio de 2013
lunes, 24 de junio de 2013
¡Viva Las Vegas!
Repámpanos cumple un año más,
como siempre en olor de multitudes. Para celebrarlo vamos a gastarnos del tirón
todas las ganancias generadas por esta página, no sea que el fin del mundo nos
pille con el dinero en el banco. Y el mejor sitio para fundir pasta es las Vegas. Allí nos verán, sacándole
chispas a las tragaperras, dejándonos llevar por algún crooner momificado
mientras acabamos con las existencias de don José Cuervo, apostándolo todo al rojo o casándonos de forma
intempestiva con alguna playmate venida a menos.
Todo este ajetreo nos dejará poco
tiempo para actualizar el blog. Deberán tener paciencia y esperar hasta
septiembre cuando daremos rendida cuenta de nuestras aventuras en la capital
del vicio. Pero vamos a aprovechar el receso estival para desgranar una serie
de melodías en blanco y negro. Este verano gracias al posteador automático haremos una pequeña recopilación de temas doo
wop, el rock vocal que nació en los años cincuenta. Bellas melodías asaetadas
por voces que revolotean en todas direcciones, amores puros, ausencias
sublimes, dichosa inocencia de un tiempo ya pasado. Vaya desde aquí nuestro
sentido homenaje a un género hoy perdido pero que encierra momentos estelares
de la historia de la música. Los Belmonts, Diamonds o Monotones pondrán la
pizca de tecnicolor a un verano que se presume gris.
Nada más que desearles felices
vacaciones y gracias por estar ahí.
Etiquetas:
editorial
lunes, 17 de junio de 2013
Antes tonto que rojo
Las
razones que llevan a uno a hacerse de izquierda o de derecha son muchas y
variadas. El ambiente familiar, la educación, inquietudes sociales, presión
religiosa, imperativos éticos o cualquier otro estímulo que le pueda a uno
salir al paso hacen que te conviertas en un carca o en un progre. Como siempre,
es la ciencia la que viene a sacarnos de nuestro error. Un trabajo aparecido en
Psychological Science firmado por Gordon Hodson y Michael A. Busseri afirma que
los de derechas se caracterizan por ser unos ceporros. Estudiaron a quince mil
personas comprobando su coeficiente de inteligencia cuando tenían once años y a
los treinta y tres volvieron a entrevistarlos para saber sus posiciones políticas.
Según estos autores, las personas con más bajo coeficiente intelectual son más
proclives a demostrar inclinaciones conservadoras. La explicación que aportan
es que estos individuos tienen mayores dificultades para adaptarse y asimilar
las diferencias, por lo que buscan mantener el orden establecido para tener una
sensación de seguridad.
Así
que los que pensaban que los de derechas no tienen dos dedos de frente aquí
tienen las pruebas, aunque la verdad es que hay que mirar mucho para encontrar
diferencias apreciables entre los principales partidos de derechas y de
izquierdas, meras correas de transmisión de los poderes económicos. Necios son los
que siguen creyendo en esa división que resulta falaz desde hace tiempo. De
acuerdo que al ver la cúpula directiva del PP podemos sospechar que en este
estudio hay más razón de la que parece, pero nosotros también tenemos que
hacernos los tontos para poder soportarlos, a estos y a los demás.
Etiquetas:
política
lunes, 10 de junio de 2013
La Estatua del jardin botanico
Los
Radio Futura empezaron enamorados de la moda juvenil en un primer disco en el
que intentaron venderlos como ídolos de adolescentes en celo. Tras la resaca
del experimento y botar a Herminio Molero, Santiago Auserón cambió el rumbo de la formación, y fruto de
ello llegó el single La estatua del jardín botánico.
La
canción supuso uno de los hitos de la movida y un himno entre loa amantes de lo
arty, enterados y modernos en general. Al fin un grupo que no solo no decía
tonterías sino que hasta parecía mandar crípticos mensajes envueltos en
imágenes deslumbradoras. Era la prueba de que la poesía y la inteligencia
tenían cabida en el mundo del pop. Muchos nos quedamos a meditar sobre el
asunto en la penumbra de un jardín, y sobre todo apurando copas después de la
medianoche, embelesados por esas metáforas que abrían un mundo de sugerencias.
Con este tema Radio Futura comenzó a cimentar una carrera cargada de grandes
canciones, pero en ninguna, el mismo Auserón le reconoce, llegaron a igualar el
lirismo y el misterio que emanan del jardín botánico.
Los años han tratado bien a la vieja estatua. Su poética futurista quizás hoy parezca
algo hueca y pretenciosa, y de tan oída ha perdido parte de su antigua magia.
En vez de una disquisición filosófica suena más al delirio de un drogata. Pero
cuando se oyen esos golpes de batería con los que se abre la canción vuelves a
un tiempo mítico en el que te creías capaz de dibujar sin que te temblara el
pulso elipsis entre el sol y tu corazón.
Etiquetas:
música
lunes, 3 de junio de 2013
El papel de la revolución
De todas las revoluciones que en este mundo han sido ninguna
tan chusca como la bolivariana. Ni el mismo libertador sabría decirnos las
bases sobre las que se asienta este movimiento amorfo y pachanguero. Con Chávez
un nuevo tipo de caudillo se ha añadido a la peregrina lista de jefazos que han
campado por las américas. Con él la revolución se hacía en chándal y en horario
de máxima audiencia. Con su personalísima forma de entender el gobierno
(sintetizada en todo el poder para mi al precio que sea) junto a sus mariachis
montó un tinglado populista apoyado en el chorro de billetes procedentes del
petróleo. El pueblo, educado a base de telenovelas y cuyo principal deseo es colocar a una hija
como próxima miss mundo, cansado de la oligarquía depredadora que los había
exprimido durante décadas, se echó en los brazos del militar que lo mismo te
soltaba una arenga que una ranchera y que prometía que los parias de la tierra
heredarían la tierra prometida, liberada al fin de las garras del imperialismo
yanqui. Entre tanto, a base de amañar elecciones y otras maniobras iba
ampliando su cotarro.
Muerto el amado líder, al que por falta de previsión no han
podido momificar para adorarlo como un Lenin caribeño, su sucesor recoge los
frutos maduros de la revolución. El problema es que la praxis bolivariana corre
peligro de irse a la mierda ante la preocupante escasez de papel higiénico que
se ha declarado en el país. Como siempre, se echa la culpa a la oposición que
hace acopio de rollos y rollos para enfangar al gobierno legítimo. El nuevo
presidente, no sabemos si inspirado en algún pajarillo que le ha cantado al
oído, ha tomado la audaz decisión de importar cuatro millones de rollos de
papel más para que nadie ande con estrecheces a la hora de rendir cuentas en el
retrete. Llama la atención que Venezuela dependa del exterior en un sector tan sensible,
y que la rutilante economía bolivariana sea incapaz de producir siquiera los
rasposos pero socorridos rollos de papel El Elefante que de tantos apuros nos
sacaron a nosotros.
La falta de papel de váter es la prueba fehaciente de que la
revolución va de culo. Los pobres venezolanos deben controlar sus esfínteres
mientras peregrinan de súper en súper en busca de un mal rollo que echarse al
ojete. Dirán que esto solo son pequeñas incomodidades materiales, pero en el
plano espiritual tampoco van a encontrar mucho consuelo. Si quieren ir a algún
templo a meditar y a reconfortarse con la palabra de dios lo van a tener
difícil pues la iglesia se está quedando sin vino de misa. Solo quedan
existencias para dos meses, luego no saben si llenar los cálices con cerveza o
con ron, que para la transustanciación
no vale cualquier brebaje. Todos los historiadores consultados están de acuerdo
en que ninguna revolución ha salido adelante sin papel de váter, y mucho menos
sin vino de misa. Tememos lo peor para nuestros camaradas.
En la larga y siniestra lista de tiranos americanos nuca
hemos tenido a alguien tan telegénico y lenguaraz como Chaves. Ha sabido agitar
a las masas para llevar el agua a su molino. Ahora las masas andan agitadas,
con el culo prieto y ni se atreven a comulgar. El libertador Bolívar estará en
su laberinto renegando de la mala suerte de su querida América.
Etiquetas:
política
lunes, 27 de mayo de 2013
De cómo aún a su pesar el caballero del Flequillo Flojo declaró sus hazañas (III)
–En este caso, la hacienda real se daría por satisfecha con
el rucio de su escudero.
–Óigame usted bien, fiscalizador de bienes ajenos, que mi
montura no tiene nada que ver con las hazañas de mi señor, que me lo gané con
el sudor de mi frente en muchas siegas y vendimias, y si quiere confiscar algo,
confísque los calzones de mi señor, que guardan huella de todos los lances de
honor que ha tenido, pero a mi burro ni me lo toque.
–Sea pues –dijo el de la mesa –alguaciles, metan presos a estos irredentos fiscales, y que paguen en galeras lo que no pagan aquí. –Como
viera Flequillo Flojo que los hombres de armas se les echaban encima, levantó
la mano para detenerles a la vez que conminaba a Marco.
–Amigo Parco, aquí te emplazo para que te sacrifiques por tu
señor. Bien sé que tienes en más estima a tu rucio que a tu esposa, que más
coces te ha dado ella que él, pero pasar esta mala jornada bien vale un animal que bien mirado ya está muy corrido y pronto a abandonar este mundo.
Entrégaselo a estos carroñeros y al buitre que los manda, que yo bien sabré
agradecerte tu gesto, y en cuanto la fortuna nos sople a favor, cabalgarás en
recio alazán, como corresponde a tu condición. –Viendo el escudero que los
cuadrilleros estaban prestos a cargarlos de grilletes, y ponderando que mejor
ir a pie pero ligero de carga que con todo el hierro de Vizcaya a cuestas,
cedió en las demandas de su señor y puso pie en tierra.
–Quién me mandaría, necio de mí, hacerle caso el día que me
sacó de mi bancal, donde tan a modo estaba yo criando mis calabazas, para
seguirle del páramo a la sierra y de la sierra a la llanada bajo la promesa de
que un día me sentaría en trono de oro, cuando a lo que se ve, voy a tener que
ir a pinrel en busca de tal asiento.
Una vez que los de la Santa Hermandad tomaron posesión del
tributo por actividades caballerescas y el secretario extendido la debida
cédula que acreditaba a su poseedor de estar al día para con la real hacienda,
dejaron paso franco a Flequillo Flojo y Marco Parco, que prestos pusieron
tierra de por medio no fuera a subir la
tasa mientras estuvieran cerca y se quedaran también con Rampante.
–No reniegues tanto, Parco amigo –dijo Terco cuando se
vieron lejos del afán recaudatorio de los hombres del rey –que de este mal paso
podemos sacar una gran lección. A saber, el soberano que sangra a sus súbditos
no merece sino nuestra reprobación. Porque las contribuciones son obligación de
todos, como de todos es la cosa pública, pero cuando el estipendio solo sirve
para empobrecer al pobre más si cabe y al poderoso hacerle más arbitrario y
arrogante, no queda otro remedio que ir a pedirle cuentas, y si no le salieran,
buscarse otro soberano que mire por el bien de sus súbditos.
–Muy buenas razones son ésas cuando se dicen desde el lomo
de su Rampante, pero como súbdito de a pie que soy, solo puedo decir que con el
fisco hemos topado, y que dios nos coja confesados como volvamos a caer en sus
manos.
Etiquetas:
quijotadas,
ventorrillo
lunes, 20 de mayo de 2013
De cómo aún a su pesar el caballero del Flequillo Flojo declaró sus hazañas (II)
–No estamos aquí para discutir si sus predecesores corrían
moros o cristianos, sino para acatar la voluntad real, que en este punto es muy
clara. Todo caballero andante que vagara por su reino, sea cual sea su cuna o
nación, deberá pagar un tributo para
sostener la campaña de Flandes, que va para largo, y bien sabrá lo costoso que
sale clavar una pica en aquellos andurriales.
– ¿Pero dónde se ha visto semejante atropello, tal escarnio
a la sagradas leyes de la caballería? –se incendió el del Flequillo Flojo, al
que el molinillo que coronaba su casco las aspas empezaron a girarle
enloquecidas –mezclar en el mismo odre sus pedestres cálculos mercantiles con
el oficio de paladín errante, donde las únicas cuentas son amor y honra.
–Cuando vaya acabando sus quejas me hará una relación por
menudo de los duelos que le han acontecido en el último año, las doncellas
rescatadas, agravios desagraviados y demás ocupaciones propias de su condición,
para que vayamos aplicándoles a cada una la tasa que le corresponda. Y tenga
presente que toda resistencia será vana, que como no afloje la bolsa aquí y
ahora los de la Santa Hermandad –señalando a los alguaciles que le rodeaban con
ganas de ponerles las manos encima –no han de tener ningún reparo de acabar con
sus huesos en prisión.
–Para que veas, Parco amigo, en que acaban los reyes y
príncipes, en vulgares asaltadores de caminos, que otra cosa no es ésta sino un
espolio en toda regla.
–No debería extrañar a su merced lo que vemos. Nobles y
magnates labraron su posición levantándole las alforjas al prójimo, normal que
cuando la necesidad aprieta vuelvan por sus fueros.
–Como sigan vituperando al rey nuestro señor les voy a
aplicar un correctivo que hará época en sus anales andantes –dijo tajante el
recaudador de impuestos, a la par que apremió a Tirso Terco a que hiciera
descripción de sus hazañas para establecer la correspondiente contribución.
Hízolo nuestro caballero de mala gana, y hasta podemos afirmar que contrariando
su juramento de ir siempre con la verdad por delante, algún lance se dejó en el
tintero.
Hizo el escribano sus cuentas y dieron un total de mil
maravedís que Tirso Terco tendría que pagar sí o sí si quería seguir ejerciendo
de caballero andante y no de caballero enjaulado.
–Pero nosotros no poseemos tal suma, que no somos mercaderes
ni chalanes, que nuestro oficio no reporta beneficio alguno, solo la gloria
venidera y el afán de servicio a nuestra dama.
–Pues idle a pedirle prestado a ella, que seguro que le
place auxiliar a su caballero.
–Antes la muerte que abusar de semejante manera de mi amada
Brisilda, que una cosa es que sea de natural liberal y otra que la vaya con ese
sablazo.
–Como la magnanimidad de nuestro señor no conoce fin,
también acepta contribuciones en especie.
– ¿Y de qué especie se trataría? –inquirió el del Flequillo
Flojo algo amoscado.
Etiquetas:
quijotadas,
ventorrillo
Suscribirse a:
Entradas (Atom)