lunes, 29 de septiembre de 2014

Los antinobel

Las ciencias avanzan que es una barbaridad. Tanto, que a veces no puedes reprimir una carcajada vistas las peregrinas direcciones que toman. El Instituto de Estudios Improbables tiene debilidad por las investigaciones que aparte de ampliar nuestro conocimiento del mundo nos alegran el día. Cada año dan los premios Ig, popularmente llamados antinobel, a los trabajos más chuscos y estrafalarios que se puedan imaginar. Este ha sido un buen año, si no compruébenlo ustedes mismos. 
En física, el elegido ha sido un resbaladizo estudio que mide la fricción entre un zapato y una piel de plátano, y entre el plátano y el suelo, cuando una persona pisa una piel de plátano en el suelo. Hay que andar con pies de plomo con este trabajo, a la espera de que sus resultados estén suficientemente contrastados con pruebas empíricas. 
En neurociencia el afortunado ganador es un equipo chino que ha intentado entender qué pasa en el cerebro de las personas que creen ver el rostro de Jesús en una tostada. No sabíamos que existía un colectivo tan amplio con semejante patología. Aunque es un tema con mucha miga, todo apunta a una sugestión tras la lectura del famoso pasaje de la multiplicación de los panes y los peces.   
En psicología han elegido un trabajo que define a la gente que trasnocha como mucho más narcisista, manipuladora y psicópata que las personas que madrugan. Además, no votan en las elecciones municipales, tiran el vidrio en los contenedores del plástico y cuando llegan los anuncios cambian de canal. 
El de salud pública es para los que estudiaron si es peligroso para la salud mental de las personas tener gato. La conclusión es que solo si tienes más de una docena puede afectar a tu cordura. 
En la rama de biología ha merecido galardón la brillante investigación que descubre que los perros cuando orinan o defecan alinean el eje de su cuerpo con las líneas norte sur del campo magnético terrestre. Trabajo perdido, que cualquier hijo de vecino sabe que mear en dirección norte sur da mucho más gustirrinín. 
En arte se premia el originalísimo experimento en el que se compara el dolor que siente la gente cuando ve un cuadro feo con el que siente cuando ve un cuadro bonito y le disparan con un láser en una mano. Dada la gran repercusión de la prueba, están preparando una variante consistente en atizarle con un ladrillo en la entrepierna mientras contemplan Saturno devorando a sus hijos, pero no encuentran voluntarios. 
El premio de economía se lo lleva el instituto de estadística de Italia, que ha aumentado el volumen de la economía italiana a base de incluir la prostitución, el tráfico de drogas y otras actividades ilícitas. Para ser justos, el premio debería ser otorgado ex aequo junto con Montoro, que  acabará contabilizando para el PIB hasta los billetes del monopoli. 
En medicina se premia un avance excepcional. Unos investigadores han tratado los sangrados incontrolables de nariz a base de rellenar las fosas nasales de cerdo curado. En una siguiente fase están valorando la posibilidad de utilizar como antiagregante plaquetario las morcillas de Burgos. Que tiemble la Bayer. 
Ciencia ártica, disciplina desconocida hasta ahora pero que entra en el olimpo bizarro con un estudio exhaustivo sobre la reacción de los renos al ver seres humanos disfrazados de osos polares. “Ya están estos cansinos haciendo el bobo” era la opinión generalizada entre estos rumiantes. 
Dejamos para el final la investigación que más nos ha impactado y con más proyección de futuro. El antinobel de nutrición es para un estudio titulado “Caracterización de bacterias de ácido láctico aisladas de heces infantiles como potenciales cultivos pro bióticos de arranque para salchichas fermentadas” El gremio de chacineros va a contratar a este equipo de investigadores sin dilación, pues la posibilidad de aislar bacterias de ácido láctico de las heces infantiles era el espaldarazo definitivo que necesitaba este sector. 

lunes, 22 de septiembre de 2014

Ni regalado

Parece que Bono y sus mariachis han perpetrado un nuevo disco. No tenemos ni el tiempo ni la paciencia para escuchar Songs of Innocence, pero poco arriesgamos al suponer que será otro truño marca de la casa. Los de U2 se han especializado en ese extraño y lucrativo género que es el rock de estadio, música megalómana para pijos con inquietudes. Y si hay una marca pija e inquieta, esa es Appel. En la presentación de sus últimos iphones, Bono y sus muchachos tocaron un temita y anunciaron urbi et orbe que iban a regalar su flamante nueva obra a los quinientos millones de usuarios de la manzanita.
Pensarán que la legendaria filantropía de Bono fue la que le llevó a tan magnánimo gesto, pero parece que el suculento cheque que le pusieron en los morros fue más convincente todavía. Además, si las ventas de discos caen en picado, las de U2 bajan más rápidas todavía, así que con el regalito seguro que han hecho un buen negocio.
Lo gracioso del asunto es que muchos usuarios de itunes se han quejado cuando han visto en su colección de música el susodicho disco, que ni habían pedido ni falta que les hacía. Los de Appel se lo han endosado a toda su distinguida clientela sin preguntárselo. Hasta tal punto ha llegado la cosa que han tenido que sacar de prisa y corriendo una aplicación con la que borrar el disco intruso, pues parece que mucha gente no lo quiere ni regalado. Lo que podía haber sido una ingeniosa campaña promocional ha terminado como un caso de spam. Y ya se sabe, con la música no deseada, a la basura con ella.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Coleccionable: Piedras


Si hay un elemento que define cualquier paisaje, que lo mismo sirve de cimiento que como elemento constructivo, inmune al paso del tiempo y a los elementos, ésta es la piedra. Cantos rodados, majestuosos sillares, cortantes lajas, toscos pedruscos, virtuosos capiteles, chinas en el zapato, peñascales de las águilas caudales, paredes pintadas al fondo de las cuevas, hoscos pedregales dominan allí donde miremos.
Gracias a la nueva colección que hoy presentamos no van a tener que andar arrancando piedras por esos mundos de dios, con el riesgo de pagar por el exceso de equipaje. La editorial Petrum Oleum se enorgullece de presentar su coleccionable Piedras, un estudiado conjunto de rocas seleccionadas entre los lugares más emblemáticos de los cinco continentes. Con esta exclusiva obra usted podrá exhibir en su salón un trocito del Parthenon, una piedra rosa de Petra, una genuina baldosa de Bilbao o un guijarro del camino de Santiago recogido en las afueras de Castrojeriz, entre otras piezas de incalculable valor histórico y científico. Todas ellas numeradas y con su correspondiente certificado de autenticidad, más un detallado estudio geológico.
Con la primera entrega, además de regalarle una útil piedra pómez, ideal para callos y durezas, entrará en el formidable sorteo de un fin de semana con todos los gastos pagados al desierto del Gobi para que pueda elegir el pedrusco que más le guste. No deje pasar esta oportunidad única.